Viviendas en la calle Gravina, Madrid
El solar objeto de concurso en la calle Gravina es un solar prácticamente imposible. Sus reducidas dimensiones suponen un reto para encajar un programa de vivienda. Por eso la propuesta "cpu" plantea soluciones nuevas en torno a la forma de habitar, o la de concebir un aparcamiento.
Esta cercanía al ensamblaje informático motiva la idea general de proyecto: Un plano vertical que contiene todas las comunicaciones e instalaciones del edificio, al que se "conectan" las piezas vivideras, o de aparcamiento, haciendo las veces de una placa base de un ordenador.
El programa se soluciona tal y como viene expresado en las bases del concurso, planteándose soluciones poco habituales en la distribución de espacios de la vivienda, que sin embargo encajan en el perfil de usuarios al que van destinadas.
En cuanto a la imagen final, el proyecto hace uso del esquema compositivo de los edificios del entorno, transcribiéndolo a un lenguaje moderno.